Los distanciadores evitan el flexionado, estabilizando así la construcción. Son utilizados cuando hay un espacio hueco entre el material y el sustrato en grandes áreas. Esta variante de plástico autoadhesivo se utiliza a menudo en el ámbito del montaje de espejos.
De este modo se absorbe la presión que se produce, p. ej., durante los trabajos de limpieza, y el espejo no se deforma. Esto proporciona seguridad al manipular el frágil material. Si el espejo está fijado con láminas de espejo autoadhesivas, una deformación provocaría que se separara la cinta adhesiva. Esto es desfavorable y puede dañar la unión adhesiva a largo plazo. Los distanciadores contribuyen a la longevidad de la conexión.