Toda la tecnología del herraje de esquinas con cierre automático está presente en este herraje de discreto diseño.
A diferencia de lo que ocurre con los herrajes de suelo convencionales, en este caso no es necesario un rebaje en el suelo. La instalación se realiza simplemente atornillando la placa base al sustrato existente. El herraje de esquinas con cierre automático de Bohle ha sido probado conforme a la norma europea DIN EN 1154 para garantizar una larga vida útil y una excelente funcionalidad.
Consejos de aplicación:
No debe utilizarse con vidrio laminado de seguridad.