El herraje de esquinas con cierre automático Alva permite una rápida instalación sin necesidad de un laborioso rebaje en el suelo. Todo el sistema hidráulico para la función de autocierre está alojado en el propio herraje. Mediante una placa base, el herraje se fija al suelo con sólo dos tornillos.
Con unas funciones destacadas, como las cómodas opciones de instalación y el diseño claro, el herraje de esquinas Alva es uno de las mejores de su clase
El herraje con fuerza de cierre EN 5 tiene las mismas dimensiones de 184 x 70 mm que el herraje de esquinas EN 3 y, por consiguiente, garantiza un aspecto uniforme para puertas de diferentes tamaños en una habitación. Es especialmente adecuado para puertas anchas y pesadas. Para que el taladrado en el sustrato pueda realizarse cómodamente, la distancia entre la pared y el primer orificio de la placa de montaje es de 29 mm, lo que proporciona espacio suficiente para la taladradora. La velocidad de cierre y el tope de final de carrera son ajustables de forma continua. El diseño del herraje es especialmente claro y se reduce a lo esencial. Gracias a la innovadora fijación insertable, no hay tornillos ni puntos de fijación visibles en las tapas del herraje de esquinas ni en la placa base. Los insertos de color negro que crean la impresión de una junta de sombra, acentúan el aspecto de calidad superior. Alva ha sido probado de acuerdo con la norma DIN EN 1154 con 500.000 ciclos de cierre según los estándares europeos para una larga vida útil y una excelente funcionalidad
Consejos de aplicación:
No se recomienda su uso con vidrios de seguridad laminados. Debido al escaso grosor de los vidrios individuales y a la carga puntual resultante en la zona del recorte del vidrio al apretar los tornillos, puede romperse el vidrio.